"Lavender": La IA de Israel para aniquilar a civiles palestinos
Por: Alfredo Jalife Rahme
No acaba de asombrar la alta letalidad tecnológica y la inimputabilidad del ejército de Israel.
El mismo primero de abril, casi en forma simultánea, ocurrió el asesinato de 7 voluntarios de World Central Kitchen y la demolición del Consulado de Irán en Damasco, donde fallecieron 16 personas, entre ellas el Gral. Mohamad Reza Zahedi (y su adjunto, Gral. Mohammad Hadi Hajriahimi) quien coordinaba al Cuerpo de los Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) con Siria y Hezbolá de Líbano (https://bit.ly/43NNLvT) que está a punto de desatar una guerra regional (https://bit.ly/43R1xxK).
Siempre postulé que detrás de la cortina de humo del premier Netanyahu en Gaza, se encuentra librar su “guerra final” contra Irán (https://bit.ly/3QfxZEP), jalando a EEUU, para así posicionarse como el único hegemón en el Medio–Oriente.
Días antes Israel había perpetrado una carnicería —400 “militantes”, la mitad niños y mujeres de Hamas y Jihad islámica, con 900 prisioneros; (https://bit.ly/3TMWwC2)— en el hospital Al Shifa (que significa: “sanación”), el máximo de Gaza, después de un sitio inhumano de 2 semanas.
En “Occidente” causó mayor conmoción, no sin justa razón, el asesinato colectivo de 7 voluntarios de World Central Kitchen y no le inmutó en la misma medida y/o proporción el asesinato colectivo de más de 33,000 palestinos, al corte de hoy, en su mayoría mujeres y niños.
No falta quienes aduzcan que el exagerado número de víctimas civiles palestinas por el ejército israelí se debe a su uso del sistema “Lavender”: la inteligencia artificial para aniquilar a una larga lista de 37,000 (¡mega-sic!) civiles palestinos “marcados” como supuestos aliados de la guerrilla sunnita de Hamas.
El cineasta y periodista israelí Yuval Abraham expuso en la revista “+972” y “Local Call” el sistema “Lavender” basado en Inteligencia Artificial (IA) del ejército israelí, con el fin de aniquilar a los “marcados” palestinos civiles (https://bit.ly/3VShzFN).
Seis funcionarios de espionaje de Israel filtraron el papel de Lavender en la guerra de Israel contra Hamas en la Franja de Gaza.
Yuval Abraham refiere un libro de hace 3 años “El Equipo Humano-Máquina: Cómo Crear Sinergia Entre La Inteligencia Humana y Artificial que Revolucionará Nuestro Mundo(https://bit.ly/43SLRtZ)”, del “Brigadier Gral.Y.S.”, hoy Comandante de la Unidad de Espionaje Israelí de Élite 8,200.
Tres años más tarde, Yuval Abraham aduce que tal “maquina (sic) existe” cuando “el ejército israelí ataca sistemáticamente a los individuos marcados mientras se encuentran en sus hogares, usualmente en la noche, cuando está su familia entera”, y que cuenta con sistemas automatizados adicionales como “Where´s Daddy? (¿Dónde está Papá?)”. ¡Que crueldad!
Según Yuval Abraham, Israel pose otro sistema de IA: “The Gospel (El Evangelio; https://bit.ly/3J8WgIs)”.
La diferencia entre The Gospel y Lavender radica en que el primero se especializa en destruir inmuebles, mientras que el segundo implementa el asesinato de la lista de “marcados” palestinos civiles, lo cual no obsta para que ambos sistemas de IA sean usados en forma simultánea.
El ejército israelí desechó, en el rotativo británico The Guardian, muy cercano a Israel, los asertos “sin ninguna base” de sus 6 funcionarios espías (https://bit.ly/3xrbcz4) y coloca en tela de juicio el programa de IA que “no es un sistema (sic), sino simplemente una base de datos cuyo propósito es contrastar las referencias de las fuentes de espionaje con el fin de producir capas actualizadas de información de las operaciones militares de las organizaciones terroristas”.
Ya desde diciembre del año pasado una evaluación del espionaje de EEUU reveló que las “bombas tontas (dumb bombs)” no-guiadas habían sido usadas en “casi la mitad de los ataques de Israel a Gaza (https://wapo.st/3vwerF2)”.
Desde su legendaria inimputabilidad, Israel usa a su antojo tanto bombas de “alta precisión” como sus “bombas tontas” no-guiadas con el fin de infligir el máximo daño inimaginable a civiles palestinos, familias enteras y sus inmuebles. ¡El Apocalipsis cibernético palestino!
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