Las cuentas de la U.
- Por: Víctor Herrera M.
- 22 ene 2019
- 3 Min. de lectura

Por estos días se decide el reinicio de clases en la Universidad del Atlántico, luego del paro nacional estudiantil, para salvar el último semestre del año anterior y casi que empalmar con el primero del 2019.
Sin embargo, la discusión sobre la financiación de la Educación Pública Superior debe continuar y por ello nos llaman la atención las cifras del presupuesto de la institución en relación con el beneficio para los estudiantes y, sobre todo, para la sociedad en general.
Veamos. A mediados de diciembre anterior el Consejo Superior de la Universidad aprobó un presupuesto de ingresos y gastos de casi $340 mil millones para el pago de nóminas y gastos de funcionamiento durante este año. La mayoría de ese dinero es de origen público, es decir proviene de los impuestos de los colombianos a través de las arcas de la Nación y del departamento del Atlántico.
Eso sin contar con otros ingresos como los $4,5 billones aprobados por el gobierno nacional para todas las universidades públicas o el reajuste porcentual y actualizado de sus aportes (3,5%). Tampoco con los recursos de la Estampilla Pro-ciudadela Universitaria ni las inversiones que hará la gobernación en la sede en Sabanalarga o las del distrito al encargarse de la remodelación de la Escuela de Bellas Artes prometida por el propio alcalde durante una emotiva ceremonia de fin de año.
De otra parte, en recientes declaraciones a la revista Semana el rector, Carlos Prasca, aseguró que la institución atiende 24.619 estudiantes (entre pregrado y posgrado).
Haciendo una simple división entre lo presupuestado por el Consejo Superior y el número de alumnos atendidos tenemos que cada estudiante le cuesta al erario público – es decir a todos nosotros – la suma de casi $14 millones anuales, es decir $7 millones por semestre…!! Ese es prácticamente el mismo costo de un estudiante por semestre en carreras afines de la Universidad del Norte, que no solo es privada si no la más costosa de la ciudad…!!
Por su parte, en la Universidad Simón Bolívar (acreditada institucionalmente, con un mayor número de grupos de investigación en Colciencias y más profesores con estudios de posgrado – Maestrías, Doctorados y post-Doctorados – que la Universidad del Atlántico) un semestre este año de Derecho o Administración de Empresas cuesta $3,2 millones; el de Contaduría Pública $ 3,1 millones; el de Ingeniera Industrial: $4 y Mecánica: $4,6 millones.
También en la Universidad Libre, seccional Barranquilla, (igualmente acreditada institucionalmente, con más grupos de investigación y profesores con posgrados) cuyo semestre de Derecho equivale a $4 millones; en Ingeniería Industrial cuesta $3,6 millones; el de Administración: $3.0 millones y en Contaduría: 2,8 millones.
Es inquietante ver que las carreras equivalentes (e incluso especializaciones) en universidades privadas de Barranquilla – con mejores condiciones académicas – resultan más económicas que las que se imparten en la universidad pública. Lo que nos llevaría a la hipotética – y quizás absurda – conclusión de que saldría mejor utilizar los dineros del presupuesto de la Universidad del Atlántico para contratar las carreras de sus alumnos en Instituciones privadas de la ciudad…!!
Por lo menos se beneficiarían muchos más estudiantes. Es decir, pasaríamos de 25 mil a por lo menos 40 mil estudiantes cobijados (de paso habría cupo para los más de 8 mil estudiantes favorecidos este año por Generación E en todo el Atlántico).
Por supuesto, estas son solo cuentas. Otra cosa es la discusión que habría que dar sobre la filosofía y los fines que deben inspirar a la educación pública por su naturaleza.
@vherrera
Comentarios